Esta es la respuesta, en formato carta abierta, a la petición recientemente recibida por la asociación amiga Conceyu del País Llionés solicitando nuestro apoyo a sus reivindicaciones y en particular a la próxima manifestación que se va a convocar pro-autonomía leonesa. En sí mismo, este diálogo supone el principio de una senda de colaboración que confiamos sea muy fructífera
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Madrid, a 19 de abril de 2021 Estimados amigos leoneses, En primer lugar, desde la Asociación Castilla nos gustaría agradecer que hayáis pensado en nosotros. Oímos vuestra aflicción, que desgraciadamente nos resulta familiar. La Asociación Socio-Cultural Castilla nació también como plataforma apartidista para defender nuestra tierra -o mejor dicho, nuestro pueblo- contra los agravios que lleva padeciendo en las últimas décadas: falta de empleo, ausencia de infraestructuras, despoblación, pérdida del patrimonio... y en última instancia, olvido de nuestra identidad. Y lo hace en forma de castellanismo respetuoso, constructivo, positivo y orientado a la defensa de la realidad diversa que hay en España. Tanto la identidad castellana como la leonesa tienen una fuerte raíz de siglos y son suficientemente robustas, claras, evidentes y reconocibles como para no necesitar copiar el modelo de otros pueblos que se definen a sí mismos como contraposición o por enfrentamiento a otras identidades. Nunca debemos caer en el error de definirnos a nosotros mismos por diferenciación con otros: nuestra identidad reside en nuestra propia esencia. Existe una evidente identidad leonesa y una evidente identidad castellana, pero tanto León como Castilla han sido víctimas de un plan de anulación dentro de la redefinición administrativa del Estado perpetrado durante la Transición. En este sentido, queremos también trasladaros algunas ideas que deberían constituir el punto de partida de una fructífera colaboración entre ambas organizaciones, tanto presente como futura. Coordinación y respeto mutuo Mientras otras identidades, otros pueblos de España, fueron promocionados a cuasi-Estados en el modelo federal de facto que constituye el Estado Autonómico, hemos visto cómo se ha negado la realidad más evidente y jugado una maniobra de anulación. Así, se ha troceando y reordenando la unidad territorial secularmente reconocible de Castilla, se ha suplantado la realidad territorial de la Región Leonesa/País Leonés por su anexión a uno de los pedazos anteriores y se han manipulado las mentes de las nuevas generaciones en un puro ejercicio de uso de neolengua orwelliana, en el que se definen gentilicios sin sentido e imposibles que pretenden borrar cualquier indicio de una realidad, identificable por sus propios y legítimos nombres. Pero lo más obtuso y pérfido del plan de anulación y negación de la realidad de nuestras identidades es justamente el error en el que no debemos caer: el enfrentamiento entre las víctimas de esta traición a nuestros pueblos. Un enfrentamiento entre leonesistas y castellanistas se presentará siempre como un ataque al propio Estado y a sus instituciones democráticas y será expuesto como un ejemplo contra la convivencia y como evidencia de que hay grupos minoritarios de ciudadanos destructivos a los que hay que ignorar. Para romper este estado de cosas, leonesistas y castellanistas tenemos que darnos cuenta de que somos compañeros en la lucha del reconocimiento institucional de nuestras regiones. Trabajando conjuntamente formaríamos el más poderoso argumento para la reforma del mapa regional, esta vez justa y acorde con la propia historia y realidad. No es un camino fácil, pero es valioso cada paso firme que nos acerque a nuestro objetivo. Tenemos una primera meta a cumplir: la segregación, conforme a las leyes vigentes en el marco de la Constitución y, en línea con su espíritu, de las provincias leonesas respecto de la Comunidad Autónoma de Castilla y León. Visión de futuro Nuestras regiones tienen una fuerte tradición milenaria. Pero no nos engañemos; nuestro pasado es condición necesaria, pero no suficiente, para solventar los problemas que sufren nuestros pueblos. Es condición necesaria porque, gracias a ese pasado, tanto Castilla como León tienen la herramienta con la que solventar su situación: el derecho a constituirse en regiones separadas, conforme al régimen constitucional vigente. No es condición suficiente, porque el ejercicio de este derecho sólo vendrá dado por nuestra determinación en el presente. El futuro no está escrito, y al igual que nuestros antepasados, debemos tomar la iniciativa de nuestros porvenires. Y es que, como ya habéis comprobado en León, la oposición a ejercer el derecho que nos ofrece la Carta Magna es enorme. Primero es necesario convencer a los ciudadanos propios; y luego, al resto de españoles, pues no olvidemos que los estatutos de autonomía deben ser aprobados por Congreso y Senado. Una tarea de persuasión nada sencilla. Para mayor escarnio, hay mucha gente con intereses contrarios a los del pueblo leonés y el pueblo castellano, lo que termina haciendo de ésta una empresa imposible. Sin embargo, nuestra Asociación cree firmemente en el éxito si unimos fuerzas y presentamos el ejercicio de este derecho de forma conjunta, de modo que tanto dentro como fuera de nuestras regiones, se vea no sólo como solución para los problemas propios, sino también para los de España entera. Juntos formaremos el más poderoso argumento para la visibilización de Castilla y de León en el concierto de las regiones. Apoyo Nos alegra poder apoyaros en este camino, os compartimos que el sentimiento de muchos castellanos, hermanados en vuestra reivindicación, os acompaña en esta marcha, que esperemos tenga el mejor de los fines y sirva para que otros leoneses y castellanos tomen conciencia de las necesidades de sus pueblos. Por consiguiente, la Asociación Socio-Cultural Castilla muestra su adhesión a vuestra reivindicación, pues la consideramos justa y necesaria no solamente para León, sino también para Castilla y para el resto de España. Es un honor que nuestro posicionamiento sea importante para vosotros; aceptar vuestra solicitud no sólo es un placer, sino también una obligación. Un saludo para el Conceyu, para el pueblo leonés y mucha suerte Fdo.: Ángel Valera (Presidente de la Asociación) José Manuel Sanz (Secretario de la Asociación)
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